Morayra presenta una arquitectura que combina el estilo tradicional canario con toques modernos, creando una ciudad visualmente atractiva. En el centro histórico, las casas blancas con techos de tejas y las estrechas calles empedradas transportan a los visitantes a otra época. Uno de los edificios más emblemáticos es el «Castillo de Morayra», una fortaleza histórica que ofrece vistas panorámicas del océano Atlántico y es un símbolo del pasado defensivo de la ciudad.
Entre las atracciones más destacadas se encuentran sus impresionantes playas, como Playa del Castillo, perfecta para relajarse y disfrutar del sol. Los amantes de la naturaleza pueden explorar el «Parque Natural Timanfaya», famoso por su paisaje volcánico, o el «Jardín Botánico Canario», que muestra la flora autóctona de la región. Para aquellos interesados en la cultura, el «Museo de Morayra» ofrece una visión detallada de la historia local, desde los tiempos de los guanches hasta la era moderna.
Además de los paisajes naturales y monumentos históricos, Morayra cuenta con modernos centros culturales y de ocio, lo que la convierte en un destino versátil tanto para el turismo como para eventos. Los visitantes pueden disfrutar de paseos por sus bellos paseos marítimos, cenar en restaurantes con vistas al mar, o sumergirse en la vida cultural local.