Premià de Mar presenta una mezcla de arquitectura mediterránea tradicional con toques modernos. Uno de los edificios más destacados es la iglesia parroquial de Sant Cristòfol, un impresionante ejemplo de arquitectura neoclásica, con un campanario icónico que domina el paisaje urbano. Al pasear por el casco antiguo de la ciudad, encontrarás calles estrechas y sinuosas bordeadas de casas encaladas, balcones llenos de flores y encantadoras tiendas locales que reflejan su pasado marinero.
Una de las principales atracciones de la ciudad es su paseo marítimo, ideal para caminatas tranquilas mientras disfrutas de vistas panorámicas del mar Mediterráneo. Las propias playas, como la Playa de Premià, son limpias, bien mantenidas y perfectas para familias, parejas o cualquiera que busque un día relajante junto al agua.
Premià de Mar también alberga el Museu de l’Estampació, que destaca el pasado industrial de la ciudad, específicamente en la producción textil. El museo es una excelente parada cultural para aquellos interesados en aprender más sobre las artesanías e industrias locales. Otro lugar imperdible es la cercana región del Maresme, conocida por su belleza costera e interior.