Barcelona está en constante evolución, con numerosos proyectos de desarrollo urbano en marcha para mejorar la infraestructura y la calidad de vida de sus habitantes. La iniciativa de «Superilles» (Supermanzanas) es uno de estos proyectos, que busca reducir el tráfico y la contaminación creando espacios peatonales en los barrios. Este esfuerzo de planificación urbana está transformando las áreas urbanas al fomentar el caminar, el uso de bicicletas y los espacios verdes.
La ciudad también está invirtiendo en energía sostenible y tecnología, posicionándose como líder en la transición hacia las ciudades inteligentes. En los últimos años, Barcelona ha implementado soluciones innovadoras como alumbrado público inteligente y sistemas de gestión de residuos, diseñados para reducir el consumo de energía y mejorar la eficiencia urbana.
Las iniciativas culturales también están en auge, con la creación de nuevos museos, galerías y espacios de actuación que muestran tanto talento local como internacional. La continua restauración de la Sagrada Familia y otros proyectos arquitectónicos aseguran que la ciudad siga siendo un museo vivo de arte e historia, atrayendo a visitantes año tras año.