El horizonte de Benidorm está dominado por edificios altos, lo que le da un carácter arquitectónico moderno y único en comparación con otras ciudades costeras españolas. A menudo se le llama «la Manhattan del Mediterráneo» debido a sus rascacielos y su planificación urbana. Entre los hitos arquitectónicos destacan el Gran Hotel Bali, uno de los edificios más altos de Europa, y el edificio Intempo, un impresionante ejemplo de diseño moderno.
Para los turistas, Benidorm ofrece una amplia variedad de atracciones. Las dos playas principales de la ciudad, Playa de Levante y Playa de Poniente, se encuentran entre las mejores de la Costa Blanca. Para quienes buscan aventura, el parque temático Terra Mítica, basado en las antiguas civilizaciones mediterráneas, es una visita obligada. Los amantes de la naturaleza disfrutarán del Parque Natural de Sierra Helada, con sus rutas de senderismo y vistas panorámicas.
Además de sus playas, Benidorm alberga varios parques y espacios verdes, como el Parque de L’Aigüera, un parque neoclásico diseñado por el arquitecto Ricardo Bofill. El Casco Antiguo de Benidorm, con sus edificios blancos tradicionales y calles estrechas, ofrece un contraste más tranquilo e histórico con los modernos rascacielos.