El paisaje arquitectónico de Denia es una mezcla de lo antiguo y lo moderno, con un casco antiguo lleno de calles estrechas y edificios históricos que contrastan con las estructuras modernas del puerto deportivo. El Castillo de Denia, situado en una colina con vistas a la ciudad, es uno de los monumentos más emblemáticos. Construido por los moros en el siglo XI, ha sido restaurado varias veces y hoy alberga el Museo Arqueológico, que narra la rica historia de la ciudad.
Otra joya arquitectónica es la Iglesia de la Asunción, de estilo barroco, ubicada en el corazón del casco antiguo. También se puede recorrer el barrio de Baix la Mar, un antiguo distrito de pescadores conocido por sus casas encaladas y acogedores restaurantes.
Para los amantes de la naturaleza, el Parque Natural del Montgó ofrece senderos espectaculares y vistas impresionantes del Mediterráneo. Las playas de Denia, como Las Marinas y Las Rotas, son otro de sus grandes atractivos, ofreciendo desde extensas playas de arena hasta calas rocosas ideales para la relajación o deportes acuáticos. Los museos, como el Museo Etnológico y el Museo del Juguete, ofrecen una inmersión adicional en la historia y la cultura de Denia.