Durango tiene una larga y rica historia que se remonta al período medieval. Originalmente fundada como un centro comercial, la ciudad ganó importancia durante la Edad Media debido a su ubicación estratégica entre las zonas interiores de España y la costa. En el siglo XIII, Durango se incorporó al Reino de Castilla y fue un importante centro de comercio. La ciudad también desempeñó un papel crucial durante la Guerra Civil Española, con varios sitios históricos que recuerdan este conflicto.
Culturalmente, Durango está impregnada de tradiciones vascas, desde su lengua (el euskera) hasta sus festivales y costumbres únicas. Uno de los eventos más destacados es la Durangoko Azoka, una feria cultural dedicada a la literatura, música y arte vascos que atrae a visitantes de toda la región cada diciembre. Además, los deportes tradicionales vascos, como la pelota y el levantamiento de piedra, son actividades comunes durante los festivales locales.
Durango también tiene una fuerte tradición musical, especialmente en la música folk vasca. La vida cultural de la ciudad está llena de conciertos, actuaciones de danza y festivales que celebran su identidad distintiva. Los visitantes pueden explorar los monumentos históricos de Durango, como la Iglesia de Santa Ana y la Cruz de Kurutziaga, que reflejan la profunda herencia religiosa y cultural de la región.