La arquitectura de Durango es una mezcla de estilos medieval, gótico y barroco, reflejo de su evolución histórica a lo largo de los siglos. El casco antiguo está caracterizado por calles estrechas y edificios bien conservados, entre ellos la hermosa Iglesia gótica de Santa Ana, un importante hito de la ciudad. Muy cerca, la Cruz de Kurutziaga, una intricada cruz gótica, es considerada una de las piezas más significativas del arte medieval en el País Vasco.
Uno de los centros culturales más importantes de la ciudad es el Museo de Arte e Historia de Durango, que ofrece una visión tanto del pasado de la ciudad como del arte contemporáneo vasco. Los visitantes también pueden disfrutar de la Plaza Ezkurdi, una plaza pública animada que sirve como centro para eventos locales y reuniones sociales. Para los amantes de la naturaleza, el Parque Natural de Urkiola ofrece rutas de senderismo, escalada de montaña y vistas impresionantes de los paisajes circundantes.
La proximidad de Durango a la costa y a las montañas vascas la convierte en un destino perfecto para actividades al aire libre. La cercana localidad de Elorrio, conocida por su arquitectura medieval y su encanto pintoresco, es otra visita obligada para quienes exploran la región. Durango ofrece una experiencia completa tanto para los amantes de la historia como para los entusiastas de la naturaleza y la cultura vasca.