La economía de Grado está principalmente basada en la agricultura, con un fuerte énfasis en la ganadería y la producción láctea, sectores fundamentales en Asturias. La ciudad también es conocida por su producción de frutas, especialmente manzanas, que se utilizan para elaborar la famosa sidra asturiana, una bebida muy apreciada en la región.
El mercado semanal de Grado es un motor económico clave, atrayendo visitantes de toda la región para comprar y vender productos agrícolas, ganado y artesanías. En los últimos años, el turismo ha ganado importancia, con un creciente número de visitantes interesados en su patrimonio cultural y natural.
Grado también es conocido por sus productos artesanales, como quesos y otras especialidades locales que se venden en los mercados. La preservación de los métodos tradicionales de producción añade un encanto especial a la economía local.