Ibiza tiene una población aproximada de 50.000 habitantes, aunque este número fluctúa significativamente durante la temporada turística alta. La ciudad tiene un perfil demográfico diverso, con una mezcla de locales, expatriados y trabajadores temporales de toda Europa y más allá. El ambiente cosmopolita de la ciudad se ve reforzado por el gran número de visitantes y residentes internacionales, lo que le da una mezcla cultural única.
En los últimos años, Ibiza ha experimentado un crecimiento demográfico, en gran parte impulsado por la industria del turismo. Un gran porcentaje de la población está involucrada en servicios de hospitalidad y turismo, lo que contribuye a la naturaleza dinámica de la fuerza laboral de la ciudad. La isla también alberga una creciente comunidad de nómadas digitales y trabajadores remotos, atraídos por su clima soleado y su vibrante escena social.