La economía de Lalín está impulsada principalmente por la agricultura, la ganadería y la silvicultura, siendo conocida por la producción de carnes de alta calidad, especialmente el cerdo, que es un ingrediente clave en el famoso cocido gallego. Las granjas locales también se especializan en la producción de productos lácteos y vegetales frescos.
En los últimos años, el turismo ha adquirido una mayor importancia, en gran parte debido a los festivales culturales y gastronómicos, así como a la creciente popularidad del ecoturismo en la región. Además, la artesanía local, como la cestería y la carpintería, también juega un papel relevante en la economía de Lalín.
El mercado local y las pequeñas empresas artesanales ofrecen productos únicos como quesos hechos a mano, embutidos y vinos locales, lo que convierte a Lalín en un destino atractivo para aquellos que buscan productos autóctonos y experiencias auténticas.