Manises tiene una arquitectura que mezcla elementos de la tradición árabe y el estilo español clásico. Las fachadas de muchas casas y edificios están adornadas con azulejos de cerámica, un homenaje a la industria que ha definido a la ciudad durante siglos. Caminar por las calles de Manises es descubrir un museo al aire libre de cerámica, con colores vibrantes y patrones detallados que decoran muchas de sus paredes.
Entre las principales atracciones se encuentra el Museo de la Cerámica, donde los visitantes pueden aprender sobre la evolución de este arte y ver ejemplos impresionantes de obras maestras locales. Otro lugar de interés es la Avenida de las Cortes Valencianas, conocida por sus murales de azulejos, que cuentan la historia de la ciudad y su conexión con la cerámica.
Para los amantes de la naturaleza, el Parque del Turia, situado cerca de la ciudad, ofrece un lugar perfecto para relajarse, caminar o disfrutar de actividades al aire libre, mientras que el Parque Carmen Sanchis, dentro de Manises, es un espacio ideal para familias y para disfrutar de un día tranquilo al aire libre.