La economía de Almuñécar se basa principalmente en el turismo, la agricultura y la pesca. El turismo es el principal motor económico, atrayendo a miles de visitantes cada año gracias a su clima, playas y patrimonio cultural. Durante los meses de verano, el número de turistas aumenta considerablemente, lo que beneficia a los hoteles, restaurantes y comercios locales.
La agricultura también desempeña un papel clave, especialmente la producción de frutas tropicales como el aguacate, el mango y la chirimoya, que crecen en las fértiles tierras alrededor de la ciudad. Estos productos se exportan a toda Europa y son un símbolo de la identidad de la región.
La pesca es otra industria importante, con el pescado fresco jugando un papel central en la gastronomía local. Los pescadores locales suministran a los mercados y restaurantes de la ciudad productos del mar de alta calidad, lo que contribuye a la oferta culinaria distintiva de Almuñécar.