La arquitectura de Morón de la Frontera refleja su variada herencia histórica, desde influencias romanas y moriscas hasta cristianas. El casco antiguo está formado por calles estrechas y sinuosas y casas encaladas, típicas de los pueblos andaluces. Entre sus principales hitos arquitectónicos destaca el Castillo de Morón, que ofrece vistas panorámicas de los campos circundantes. La Iglesia de San Miguel, construida entre los siglos XV y XVIII, es otro monumento importante, con una mezcla de estilos gótico y barroco.
Otros puntos de interés incluyen el Museo de la Cal, que explora la importancia histórica de la producción de cal en la ciudad. Los visitantes también pueden disfrutar de los parques cercanos, como la Sierra de Esparteros, que es ideal para practicar senderismo y actividades al aire libre. Las plazas del centro de la ciudad, como la Plaza del Ayuntamiento, ofrecen un entorno encantador para relajarse y sumergirse en la vida local.