Fraga es una ciudad con una interesante diversidad arquitectónica, fruto de su historia. El casco antiguo es un laberinto de estrechas callejuelas y casas tradicionales que muestran estilos góticos y románicos. Uno de los edificios más importantes de la ciudad es la Iglesia de San Pedro, de estilo gótico, construida en el siglo XIV. Su torre campanario es uno de los símbolos más reconocibles de Fraga y ofrece vistas panorámicas de los alrededores.
El Palacio Montcada, un majestuoso edificio renacentista, es otro de los puntos más destacados de la ciudad. Actualmente alberga un museo que exhibe arte y objetos históricos de la región. Para los amantes de la naturaleza, Fraga ofrece paseos a lo largo del río Cinca y el acceso a la Sierra de Alcubierre, donde se pueden realizar caminatas y paseos en bicicleta.
Otros puntos de interés incluyen las diversas capillas y pequeños santuarios esparcidos por la ciudad, como la Ermita de San Salvador. En resumen, Fraga es una mezcla equilibrada entre patrimonio arquitectónico e impresionantes espacios naturales, lo que la convierte en un destino ideal tanto para turistas como para residentes locales.