La arquitectura de Sabiñánigo combina estilos tradicionales de montaña con construcciones modernas que reflejan su pasado industrial. Entre sus principales atractivos arquitectónicos destacan las iglesias del Serrablo, una serie de iglesias románicas y mozárabes que son únicas en la región y están reconocidas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Estos monumentos son un testimonio de la importancia histórica y cultural de la región en la Edad Media.
El Museo Ángel Orensanz y Artes de Serrablo es otra visita obligada para los turistas interesados en la historia local y el arte tradicional. Aquí se pueden explorar exposiciones que van desde la etnografía hasta las artes plásticas, ofreciendo una visión completa del legado cultural de la zona.
Para los amantes de la naturaleza, Sabiñánigo ofrece acceso directo al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, uno de los destinos naturales más impresionantes de España. Este parque es ideal para el senderismo, la escalada y la observación de la fauna salvaje, proporcionando un entorno espectacular para los visitantes.