Aunque históricamente centrada en la agricultura, la economía de Son Servera hoy en día se basa principalmente en el turismo. El pueblo y sus alrededores atraen a miles de visitantes cada año, que vienen en busca de las playas, el clima templado y el ambiente relajado. La gestión hotelera, los restaurantes y otros servicios han florecido en la zona, contribuyendo significativamente a la economía local.
La agricultura aún juega un papel importante, con la región circundante conocida por la producción de almendras, aceitunas y vinos locales. Las artesanías tradicionales, como la alfarería hecha a mano y el tejido de cestas, también son una parte importante de la economía local, con muchos de estos productos vendidos en el mercado semanal. Además, Son Servera tiene un número creciente de negocios enfocados en la sostenibilidad, particularmente en el turismo y la producción local.
La proximidad del pueblo a resorts más grandes como Cala Millor también significa que Son Servera se beneficia del flujo de turistas hacia estos destinos cercanos, creando un entorno empresarial local vibrante.