Donostia es conocida por su hermosa combinación de estilos arquitectónicos, que van desde lo medieval hasta el período de la Belle Époque. Uno de sus monumentos más emblemáticos es el Palacio de Miramar, antigua residencia de verano de la realeza que ofrece vistas a la Bahía de La Concha. El casco antiguo de la ciudad, la Parte Vieja, es un laberinto de calles estrechas llenas de bares de pintxos, iglesias históricas y arquitectura tradicional vasca, con la impresionante Basílica de Santa María del Coro en su corazón.
Entre las atracciones imprescindibles de Donostia se encuentra la serie de esculturas «El Peine del Viento», de Eduardo Chillida, situada al final occidental de la Bahía de La Concha. Es una maravilla artística y natural donde las esculturas de hierro se funden con los acantilados y las olas que rompen. El Palacio de Congresos Kursaal, una joya arquitectónica moderna diseñada por Rafael Moneo, es uno de los principales recintos para eventos de la ciudad, fusionando diseño contemporáneo con el paisaje costero.
Para los amantes de la naturaleza, el Monte Igueldo ofrece vistas panorámicas de la bahía y la ciudad, y es accesible mediante un encantador funicular. Las playas de la ciudad, incluida la Playa de La Concha y la Playa de Ondarreta, son perfectas para relajarse o disfrutar de deportes acuáticos. Además, el Museo San Telmo ofrece a los visitantes una inmersión en la cultura y la historia vasca.