Teror cuenta con una población de aproximadamente 13,000 habitantes, lo que lo convierte en una comunidad pequeña pero vibrante. La población es predominantemente española, con raíces profundas en la cultura y las tradiciones canarias. La demografía del pueblo tiende hacia una población mayor, lo que refleja su carácter rural y tranquilo, aunque también hay familias jóvenes y profesionales que aportan vitalidad y continuidad a las tradiciones locales.
Aunque la población se mantiene relativamente estable, Teror experimenta un aumento de visitantes y residentes temporales durante los festivales y las temporadas festivas. La importancia religiosa y cultural de Teror atrae a personas de toda Gran Canaria, así como a turistas internacionales que buscan experimentar su atmósfera única.