Santa Cruz de la Palma tiene una historia rica que se remonta a finales del siglo XV, cuando fue fundada por el conquistador español Alonso Fernández de Lugo. Originalmente establecida como una ciudad portuaria debido a su ubicación estratégica en las rutas comerciales entre Europa y América, la ciudad rápidamente se convirtió en un importante centro de actividad marítima. La disposición de la ciudad y su arquitectura todavía reflejan su pasado colonial, con calles adoquinadas y mansiones bien conservadas.
La ciudad está profundamente arraigada en la cultura canaria tradicional, con festivales y costumbres locales que han perdurado durante siglos. Una de las celebraciones más importantes es la Bajada de la Virgen de las Nieves, un festival religioso que se celebra cada cinco años y atrae a multitudes de toda la región. Durante el festival, los lugareños honran a la Virgen de las Nieves, patrona de la isla, con procesiones, desfiles coloridos y danzas tradicionales. Otros eventos culturales importantes incluyen el Carnaval de Santa Cruz de la Palma, uno de los más vibrantes de las Islas Canarias.
Entre los monumentos históricos más destacados se encuentran el Real Castillo de Santa Catalina, una fortaleza del siglo XVII, y la iglesia renacentista de El Salvador, que alberga techos de madera tallada y altares artísticos. El Museo Naval, ubicado en una réplica de la Santa María, también rinde homenaje a la historia marítima de la ciudad.