La economía de Santa Cruz se basa en gran medida en el turismo, dado su atractivo como destino vacacional y su ubicación privilegiada en las Islas Canarias. La ciudad atrae a visitantes durante todo el año gracias a su clima agradable, hermosas playas y rica escena cultural. Como resultado, la industria hotelera desempeña un papel importante en la economía local, con numerosos hoteles, restaurantes y negocios relacionados con el turismo operando en la ciudad.
Además del turismo, Santa Cruz se beneficia de su posición estratégica como ciudad portuaria. El Puerto de Las Palmas es uno de los puertos más importantes de España y sirve como un centro de transporte y comercio entre Europa, África y América. La ciudad también tiene un creciente sector tecnológico y de servicios, con varias empresas que tienen su sede en la zona.
Los productos locales, como los vinos canarios y productos agrícolas como los plátanos y las frutas tropicales, también contribuyen a la economía. Los mercados y tiendas artesanales de la ciudad ofrecen una gama de productos hechos a mano, que incluyen cerámica, joyería y textiles, reflejando la herencia cultural de la isla.