El paisaje arquitectónico de Béjar es una mezcla de influencias medievales, renacentistas y modernas. El casco antiguo es particularmente encantador, con calles estrechas y sinuosas y edificios históricos que crean una atmósfera antigua y acogedora. El Palacio Ducal de Béjar es una de las atracciones arquitectónicas más importantes de la ciudad, con su diseño renacentista y sus hermosos jardines que son perfectos para paseos tranquilos. Las murallas y torres medievales de la ciudad, que han sido parcialmente restauradas, ofrecen impresionantes vistas de las montañas y los valles cercanos.
Otros monumentos notables incluyen la Iglesia de El Salvador, del siglo XII, y la Plaza Mayor, la plaza central de la ciudad, donde los lugareños se reúnen para socializar. La plaza está rodeada de edificios históricos y a menudo es el punto focal de muchos festivales y eventos culturales de la ciudad.
Para los amantes de la naturaleza, Béjar es la puerta de entrada a las montañas de la Sierra de Béjar, que incluyen la estación de esquí de La Covatilla, un destino popular durante los meses de invierno. Los alrededores naturales, incluidos parques y rutas de senderismo, ofrecen muchas oportunidades de exploración, mientras que los pequeños museos de la ciudad, como el Museo de Historia Industrial Textil, muestran el papel de Béjar en el pasado industrial de España.