La historia de Berga está profundamente arraigada en la tradición catalana, con influencias que se remontan a la época romana. La ciudad creció significativamente durante la Edad Media, cuando desempeñó un papel estratégico y militar importante debido a su proximidad a los Pirineos y al Reino de Aragón. A lo largo de su historia, Berga ha sido escenario de diversos conflictos, incluyendo las guerras carlistas en el siglo XIX, cuando fue brevemente declarada capital del carlismo en España.
Culturalmente, Berga es más conocida por su festival La Patum, reconocido por la UNESCO. Este evento, que se celebra durante la festividad del Corpus Christi, tiene sus raíces en la Edad Media y es una vibrante mezcla de música, fuegos artificiales y actuaciones tradicionales catalanas. Involucra efigies, bailes simbólicos y exhibiciones pirotécnicas que atraen a miles de visitantes cada año. El festival es un elemento clave de la identidad de Berga y una parada obligada para cualquier persona interesada en experimentar la cultura catalana.
Además, Berga alberga diversos hitos culturales e históricos, como la Iglesia de Sant Pere de Madrona y el Santuario de Queralt. Las tradiciones locales, desde los bailes folclóricos hasta la gastronomía, se han transmitido de generación en generación, brindando a los visitantes una profunda conexión con las raíces culturales de Cataluña.