El paisaje arquitectónico de Cardedeu es una mezcla de estilos históricos y modernos, con gran parte de su encanto proveniente de su bien conservado casco antiguo. El centro de la ciudad cuenta con calles estrechas y sinuosas, flanqueadas por edificios de piedra que datan de varios siglos atrás. Uno de los hitos arquitectónicos más significativos es la Iglesia de Santa Maria, una iglesia románica con añadidos góticos posteriores que reflejan la herencia medieval de la ciudad.
Para quienes están interesados en la arquitectura modernista, la Casa Golferichs es una visita obligada. Esta casa modernista, construida a principios del siglo XX, muestra los movimientos artísticos y arquitectónicos que influyeron en Cataluña durante esa época. Además, la ciudad cuenta con varios parques y jardines públicos, como el Parque de la Serreta, donde los visitantes pueden relajarse y disfrutar del entorno natural.
Los amantes de la naturaleza apreciarán la cercanía al Parque Natural del Montseny, que ofrece senderos para caminatas, áreas de picnic y oportunidades para explorar la flora y fauna diversa de la región. La belleza escénica del parque lo convierte en un destino popular para quienes buscan conectarse con la naturaleza mientras permanecen cerca de las comodidades urbanas de Cardedeu y Barcelona.