La economía de La Llagosta ha estado tradicionalmente impulsada por la agricultura y la industria, aunque en los últimos años, el municipio ha visto un crecimiento en el sector de servicios. Históricamente, la ciudad fue un centro agrícola, especialmente en el cultivo de cereales y hortalizas, que se vendían en los mercados cercanos. Sin embargo, el siglo XX trajo consigo una notable industrialización, con la instalación de fábricas y plantas manufactureras, especialmente en los sectores automotriz y textil.
Hoy en día, aunque algunas de estas industrias permanecen, la economía local se ha diversificado. Pequeñas empresas y el comercio minorista local juegan un papel importante, proporcionando empleo y contribuyendo a la economía del pueblo. La ubicación estratégica de La Llagosta cerca de Barcelona también la convierte en una base atractiva para empresas que desean operar dentro del alcance de la ciudad sin los altos costos asociados con el área metropolitana.
Un aspecto único de La Llagosta es su enfoque en el desarrollo sostenible, con varias iniciativas locales orientadas a promover la energía verde y reducir el impacto ambiental de sus industrias. Este enfoque en la sostenibilidad está haciendo que el municipio sea cada vez más atractivo para los visitantes y organizadores de eventos conscientes del medio ambiente.