La economía de Ripollet se ha basado tradicionalmente en la agricultura, pero en tiempos modernos se ha diversificado hacia la manufactura, el comercio y los servicios. La ciudad se beneficia de su cercanía a la actividad económica de Barcelona, lo que la convierte en un lugar popular para industrias como la logística, la manufactura ligera y el comercio minorista.
El gobierno local ha hecho esfuerzos para promover Ripollet como un centro para pequeñas y medianas empresas, especialmente en sectores como la tecnología, la producción de alimentos y las artesanías. Ripollet también cuenta con un mercado local en crecimiento, donde los visitantes pueden encontrar una variedad de productos locales, como productos frescos, quesos artesanales y productos de panadería tradicionales catalanes.
El turismo, aunque no es una industria principal, está cobrando importancia debido a la ubicación de Ripollet dentro del área metropolitana de Barcelona, atrayendo a visitantes que buscan un destino más tranquilo pero fácilmente accesible.