Rubí es fácilmente accesible gracias a su proximidad a Barcelona y sus excelentes conexiones de transporte. La ciudad está conectada a Barcelona mediante una red de trenes regionales, con trenes frecuentes que ofrecen una forma rápida y eficiente de llegar a la capital catalana. También está bien conectada por carreteras principales, lo que facilita llegar en coche o autobús desde otras partes de Cataluña y España. Para los visitantes internacionales, el aeropuerto de Barcelona-El Prat está a solo 30 minutos en coche, con vuelos a y desde las principales ciudades de Europa y más allá.
Dentro de Rubí, el sistema de transporte público incluye autobuses locales y rutas ciclistas, lo que facilita moverse por la ciudad. Su diseño compacto y calles amigables para los peatones permiten a los visitantes explorar la mayoría de las áreas a pie, convirtiéndola en un destino ideal para quienes prefieren viajar de manera sostenible.
Para los organizadores de eventos, la infraestructura de la ciudad garantiza que tanto los invitados locales como internacionales puedan llegar fácilmente a los lugares y alojamientos, lo que aumenta el atractivo de Rubí como destino para conferencias y reuniones.