La economía de Tiana se basa principalmente en la agricultura, la pequeña industria y, cada vez más, el turismo. Las tierras fértiles alrededor de Tiana son ideales para el cultivo de uvas, y la viticultura juega un papel importante en la economía local. El pueblo forma parte de la región vinícola de Alella, conocida por la alta calidad de sus vinos, y los viñedos locales no solo producen vino, sino que también ofrecen servicios turísticos como catas y visitas.
En los últimos años, el turismo ha crecido, especialmente entre aquellos que buscan una alternativa más tranquila a Barcelona, sin alejarse de sus atracciones. El sector de la hospitalidad y los eventos ha aprovechado esta tendencia, con negocios locales que ofrecen servicios para bodas, retiros y conferencias.
El trabajo artesanal también prospera en Tiana, con artesanos que crean productos que reflejan la herencia cultural de la región. Estos incluyen cerámica catalana tradicional, textiles y alimentos artesanales como aceite de oliva y quesos, disponibles en mercados locales y tiendas.