La arquitectura de Tordera es una mezcla de estilos medievales y modernos, con su centro histórico exhibiendo encantadores edificios que reflejan el pasado de la ciudad. La Iglesia de Sant Esteve es uno de los monumentos arquitectónicos más importantes de la ciudad. Esta iglesia de estilo románico-gótico, construida en el siglo XI, es un símbolo del patrimonio medieval de Tordera y proporciona un impresionante punto de referencia visual en la ciudad. Los visitantes también disfrutarán caminando por las calles pintorescas de la ciudad, con casas tradicionales catalanas y pequeñas plazas.
Uno de los atractivos que no se pueden perder en Tordera es el Parque Natural del Montnegre i el Corredor, que ofrece un impresionante paisaje natural ideal para practicar senderismo, observación de aves y explorar la naturaleza. Para un día familiar, Marineland Catalunya, un parque acuático y delfinario situado cerca de Tordera, es una opción popular para los visitantes con niños.
Además de sus atractivos históricos y naturales, Tordera cuenta con una serie de espacios públicos, parques y mercados locales que invitan a los visitantes a sumergirse en la vida cotidiana de la ciudad. El Mercado de Tordera, que se celebra semanalmente, es una excelente manera de experimentar la cultura local y adquirir algunos recuerdos únicos o probar productos frescos de la región.