La economía de Tordera ha estado tradicionalmente basada en la agricultura, con las fértiles tierras alrededor del río Tordera que proporcionan condiciones ideales para el cultivo. Sin embargo, con el tiempo, la ciudad ha diversificado su economía, y hoy en día el turismo juega un papel cada vez más importante en el desarrollo local. La proximidad a las playas de la Costa Brava y a grandes ciudades turísticas como Barcelona y Girona han hecho de Tordera un destino atractivo para los visitantes que buscan un ambiente más relajado.
Además del turismo, Tordera tiene un sector industrial en crecimiento, con varias empresas manufactureras ubicadas en la zona. La producción textil es una industria destacada, con la ciudad históricamente involucrada en la fabricación de telas y prendas de vestir. También hay negocios locales centrados en la producción artesanal, particularmente en cerámica, que son populares tanto entre los lugareños como entre los visitantes.
El mercado semanal, que atrae a personas de toda la región, también juega un papel importante en la economía de la ciudad, contribuyendo al sector minorista y de servicios locales. Pequeños restaurantes, tiendas y puestos de artesanías prosperan gracias a la afluencia de visitantes cada semana.