Blanes presenta una fascinante mezcla de estilos arquitectónicos, con vestigios de sus orígenes romanos, fortificaciones medievales e influencias modernistas. Uno de los lugares más icónicos de la ciudad es el Jardín Botánico Marimurtra, ubicado en los acantilados sobre el mar. Este impresionante jardín alberga más de 4,000 especies de plantas y ofrece vistas panorámicas impresionantes del Mediterráneo, lo que lo convierte en una visita obligada para los amantes de la naturaleza y un hermoso lugar para organizar eventos.
La Iglesia de Santa María, que data del siglo XIV, es un ejemplo destacado de arquitectura gótica. Los visitantes también pueden explorar la Roca de Sa Palomera, un emblema de Blanes que marca el inicio de la Costa Brava. Cerca de allí, el castillo medieval de Sant Joan ofrece un vistazo al pasado defensivo de la ciudad y brinda vistas espectaculares de la costa circundante.
Las playas de Blanes son sin duda sus principales atracciones. La Platja de Blanes, la playa principal de la ciudad, es un extenso tramo de arena ideal para familias y aficionados a los deportes acuáticos. Para una experiencia más tranquila, Cala Bona ofrece una cala pintoresca rodeada de acantilados escarpados. Blanes también cuenta con varios parques y espacios verdes, como el jardín tropical Pinya de Rosa, lo que aumenta el atractivo de la ciudad para los amantes de la naturaleza.