En los últimos años, Cassà de la Selva ha apostado por un desarrollo sostenible y el fomento del turismo ecológico. El gobierno local ha invertido en proyectos de infraestructura para preservar los paisajes naturales de la región, promoviendo al mismo tiempo un turismo responsable. Iniciativas como la mejora de los senderos para caminar y montar en bicicleta, así como el impulso de la agricultura orgánica local, han ganado popularidad entre los visitantes interesados en el turismo sostenible.
Además, la ciudad ha visto una revitalización de su centro histórico, con iniciativas culturales que apoyan la artesanía local y los mercados tradicionales. Estas actividades han atraído a turistas interesados en conocer la cultura catalana de manera auténtica.
En cuanto al desarrollo urbano, se ha priorizado la modernización de los espacios públicos y la mejora de la accesibilidad, sin sacrificar el encanto histórico de la ciudad. Esta estrategia de equilibrio entre innovación y conservación ha asegurado que Cassà de la Selva siga siendo un destino atractivo tanto para residentes como para visitantes.