La arquitectura de La Escala es una mezcla encantadora de estilos tradicionales catalanes e influencias mediterráneas modernas. El casco antiguo histórico, con sus estrechas calles empedradas y edificios encalados, transporta a los visitantes a épocas pasadas. Entre los monumentos clave se encuentra la Iglesia de Sant Pere, una hermosa estructura gótica que sirve como punto focal en la plaza principal del pueblo. El cercano yacimiento arqueológico de Empúries es una visita obligada, con ruinas griegas y romanas que incluyen mosaicos, templos y villas.
Para los amantes de la naturaleza, las playas del pueblo, como Platja de Riells y Platja del Rec del Molí, ofrecen arenales prístinos y aguas cristalinas. Los visitantes también pueden explorar el Parque Natural del Montgrí, una zona costera escarpada con senderos para caminar y vistas impresionantes del Mediterráneo y las cercanas Islas Medes.
El paseo marítimo de La Escala es un lugar animado para pasear, lleno de cafés, restaurantes y tiendas. El Museo de la Anchoa (Museu de l’Anxova i de la Sal) es otra atracción única, celebrando la herencia pesquera del pueblo y la importancia de la producción de anchoas en su economía.