La arquitectura en Palamós es una fusión de estilos medievales, góticos y modernos que reflejan su rica historia como ciudad portuaria. El casco antiguo es uno de los principales atractivos, con sus calles empedradas, edificios bien conservados y plazas animadas que transportan a los visitantes a otra época.
Entre los monumentos más destacados se encuentra el Castell de Sant Esteve de Mar, una fortaleza que data del siglo XII, situada en una colina con vistas impresionantes al Mediterráneo. Este castillo es un lugar imprescindible tanto para los amantes de la historia como para quienes disfrutan de las vistas panorámicas. Otro punto de interés es el Museu de la Pesca, el único museo en el Mediterráneo dedicado exclusivamente a la pesca, que explora la importancia de esta industria en la región.
Para los amantes de la naturaleza, el Camí de Ronda es un sendero costero que ofrece vistas espectaculares de los acantilados y calas escondidas, como la pintoresca Cala S’Alguer, rodeada de casitas de pescadores tradicionales.