La economía de Badajoz está impulsada por varios sectores, siendo la agricultura uno de los más destacados debido a las fértiles tierras que rodean la ciudad. La producción de aceite de oliva, vino y otros productos agrícolas es clave para la región. Además, la cercanía de Badajoz con Portugal favorece el comercio transfronterizo y el desarrollo económico de la ciudad.
El turismo es un sector en crecimiento, con visitantes atraídos por los sitios históricos, los festivales y la mezcla cultural única. También es importante el sector público y la educación, ya que Badajoz alberga diversas oficinas administrativas y la Universidad de Extremadura, lo que contribuye a la economía local.
El comercio artesanal también desempeña un papel importante, con productos tradicionales como cerámica y artículos de cuero hechos a mano que son muy populares entre los visitantes. Además, la ciudad organiza ferias comerciales y eventos empresariales que fortalecen su reputación como centro de negocios en la región.