Mérida tiene una población de aproximadamente 60.000 habitantes, con una mezcla diversa de grupos demográficos. Aunque la mayoría de los residentes son de origen español, la ciudad también ha atraído a inmigrantes de América Latina y Portugal, lo que ha enriquecido su diversidad cultural. Mérida ha experimentado un crecimiento poblacional moderado en las últimas décadas, en parte debido a su papel como centro administrativo y su creciente atractivo turístico.
La ciudad cuenta con una buena representación de jóvenes profesionales, atraídos por sus oportunidades educativas y su costo de vida asequible. Al ser la capital de Extremadura, Mérida también acoge a una población significativa de funcionarios públicos y trabajadores del sector servicios.