Santiago de Compostela está ubicada en la provincia de A Coruña, en la región noroeste de Galicia, España. Aunque se encuentra tierra adentro, la ciudad está a solo 30 kilómetros del Atlántico, lo que permite un fácil acceso a las impresionantes playas y paisajes costeros. Rodeada de colinas onduladas y verdes, Santiago es un ejemplo perfecto del clima oceánico templado de Galicia. Cerca de la ciudad se encuentran A Coruña y Vigo, ambas a una hora en coche, así como la costa de las Rías Baixas, conocida por sus impresionantes rías y playas.
El clima en Santiago está fuertemente influenciado por el océano Atlántico, lo que resulta en temperaturas suaves durante todo el año. Los veranos son agradables, con máximas que rondan los 25°C, mientras que los inviernos son frescos y húmedos, con temperaturas alrededor de los 8°C. La ciudad recibe abundantes lluvias, especialmente entre otoño y primavera, lo que le da su característico paisaje verde. Los mejores momentos para visitar son finales de primavera y principios de otoño, cuando el clima es más agradable y hay menos aglomeraciones.