La historia de Verín se remonta a tiempos antiguos, con una fuerte influencia romana que aún es visible en la arquitectura y la infraestructura de la región. La ubicación estratégica de la ciudad cerca de la frontera con Portugal la convirtió en un importante centro militar y comercial a lo largo de los siglos. Durante la Edad Media, Verín fue fortificada para defenderse de las invasiones, y muchos de sus castillos y fortalezas de esta época todavía se conservan hoy en día, añadiendo encanto histórico a la ciudad.
Culturalmente, Verín es famosa por su «Entroido», uno de los carnavales más importantes y vibrantes de toda España. Este festival presenta máscaras tradicionales, disfraces elaborados y desfiles que llenan las calles de color y música. Es una tradición profundamente arraigada que ha sido transmitida de generación en generación, atrayendo a miles de visitantes cada año. La cultura de Verín también está estrechamente relacionada con la tradición vinícola de la región, especialmente los vinos de la Denominación de Origen Monterrei, que son algunos de los más respetados en Galicia.
Además, Verín es conocida por sus aguas termales. Las aguas termales, especialmente las de Caldeliñas y Cabreiroá, han sido utilizadas desde la época romana por sus propiedades medicinales. Los visitantes aún pueden disfrutar de las cualidades relajantes y terapéuticas de estas aguas, que continúan siendo un atractivo principal para el turismo de bienestar.