Históricamente, la economía de Colmenar Viejo ha estado profundamente ligada a la agricultura, particularmente a la ganadería. La ciudad ha sido un centro de producción de carne y productos lácteos durante siglos, y estas tradiciones aún son visibles en la vida económica local. Con el tiempo, la economía de la ciudad ha diversificado sus actividades, y hoy en día también se destaca por su sector de servicios, el turismo y la pequeña industria.
Uno de los productos locales más famosos es el queso de Colmenar Viejo, elaborado a partir de leche de ovejas y vacas criadas en los pastizales circundantes. Este queso es muy valorado por su sabor y calidad, y es un elemento común en los mercados locales. Además, la ciudad cuenta con varias pequeñas empresas familiares que producen artesanías y productos locales, añadiendo un toque único a la economía local.
Colmenar Viejo también se beneficia de su cercanía a Madrid, lo que ha fomentado el crecimiento del comercio minorista y ha impulsado la demanda de servicios de transporte y logística.