La economía de Parla está impulsada en gran medida por su papel como ciudad dormitorio de Madrid, pero también mantiene una fuerte identidad local a través de su floreciente sector de servicios y comercio. La economía de la ciudad ha evolucionado con el tiempo, pasando de una base agrícola a una que ahora incluye el comercio, la fabricación y los servicios. Las empresas locales de Parla atienden a una población en crecimiento, ofreciendo desde servicios de construcción hasta ofertas de hospitalidad y comercio minorista.
La proximidad de la ciudad a Madrid facilita el desplazamiento diario, lo que ha fomentado el crecimiento de proyectos de vivienda y desarrollo de infraestructuras. Además, los mercados y tiendas locales siguen apoyando la herencia agrícola de Parla, siendo los productos frescos de las granjas cercanas un pilar de la economía local. Parla también alberga pequeñas industrias manufactureras, lo que contribuye a la diversidad económica de la ciudad.
El turismo, aunque no es la principal industria de la ciudad, juega un papel cada vez más importante, con organizadores de eventos y visitantes atraídos por la ubicación conveniente de la ciudad, sus precios razonables y su ambiente acogedor.