La historia de Fortuna se remonta a miles de años, con influencias notables de las civilizaciones romana, morisca y cristiana. El nombre de la ciudad proviene de la diosa romana Fortuna, lo que refleja su importancia durante la época romana, cuando se descubrieron y veneraron sus fuentes termales por sus propiedades curativas. Los romanos construyeron baños y templos dedicados a la diosa, y estos antiguos balnearios sentaron las bases de la reputación de la ciudad como destino de bienestar.
Durante el período morisco, Fortuna siguió prosperando como un centro agrícola y comercial. Los moros desarrollaron sistemas de irrigación sofisticados, algunos de los cuales aún se pueden ver en el campo circundante. Tras la Reconquista cristiana, la ciudad fue integrada en el Reino de Castilla, y su identidad cultural continuó evolucionando con la construcción de iglesias, monasterios y fortificaciones que hoy son hitos históricos importantes.
Fortuna también alberga ricas tradiciones y festivales culturales, como las Fiestas Patronales en honor a los santos patronos de la ciudad. Estas celebraciones llenas de vida incluyen desfiles, música tradicional, danzas y procesiones religiosas, ofreciendo a los visitantes una visión de la vibrante vida cultural de la ciudad.