Villajoyosa es fácilmente reconocible por sus casas multicolores que se alinean a lo largo de la costa. Estas casas, pintadas en tonos vibrantes, originalmente ayudaban a los pescadores a identificar sus hogares desde el mar. El casco antiguo de la ciudad, con sus calles estrechas y sinuosas, ofrece un entorno encantador e histórico para explorar.
Uno de los monumentos más emblemáticos es la iglesia fortificada gótica de Santa Marta, construida en el siglo XVI y dedicada a la patrona de la ciudad. La iglesia es un testimonio del patrimonio religioso y arquitectónico de Villajoyosa. Otro sitio de visita obligada es el Museo del Chocolate Valor, donde los visitantes pueden descubrir más sobre la tradición chocolatera de la ciudad.
Las playas de Villajoyosa son otro gran atractivo turístico, con la Playa Centro siendo la más popular. Esta larga playa de arena ofrece un espacio amplio para relajarse y practicar deportes acuáticos, mientras que otras playas más tranquilas como la Playa Bol Nou brindan un entorno más sereno. Para los amantes de la historia, las ruinas romanas de la antigua ciudad y las torres defensivas a lo largo de la costa son puntos de interés que reflejan el pasado antiguo de la región.