La historia de Alcora se remonta a tiempos antiguos, con influencias de los romanos, los moros y los cristianos. Sin embargo, el momento clave en la historia de la ciudad ocurrió en el siglo XVIII, cuando se convirtió en un importante centro de producción de cerámica. La Real Fábrica de Loza y Porcelana del Conde de Aranda, fundada en 1727, puso a Alcora en el mapa como uno de los principales productores de arte cerámico en España, una tradición que continúa hasta el día de hoy. El Museo de la Cerámica en la ciudad es un testimonio vivo de esta rica herencia.
Alcora es conocida por sus festivales y tradiciones culturales, siendo uno de los más destacados «La Rompida de la Hora», una celebración durante la Semana Santa en la que cientos de tamborileros se reúnen en la plaza del pueblo para producir un sonido ensordecedor que simboliza la ruptura del tiempo. Este evento es un espectáculo visual y auditivo que deja una impresión duradera en los visitantes.
La ciudad también celebra la «Fira del Fang» (Feria del Barro), una festividad dedicada a la cerámica que honra la tradición artesanal de Alcora. Los visitantes pueden disfrutar de demostraciones en vivo, comprar cerámica hecha a mano y participar en talleres que permiten una inmersión total en la cultura local.