La arquitectura de Alcira es una mezcla encantadora de estilos gótico, morisco y moderno. El casco antiguo de la ciudad, con sus calles estrechas y edificios históricos, es un lugar ideal para pasear y disfrutar de la atmósfera. La Iglesia Parroquial de Santa Catalina, construida en el siglo XIII, es uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad, y muestra una mezcla de elementos góticos y barrocos.
Otro lugar de interés son las Murallas de Alcira, restos de las antiguas fortificaciones de la época musulmana. Estas murallas ofrecen una visión del importante papel defensivo que la ciudad desempeñó en el pasado. Para los amantes de la naturaleza, el Valle de la Murta, situado a las afueras de la ciudad, ofrece rutas de senderismo a través de paisajes exuberantes y alberga las ruinas del Monasterio de La Murta, un lugar sereno y lleno de historia, ideal para una excursión.
Alcira también es conocida por sus parques públicos, entre ellos el Parque de la Alquenència, que ofrece un entorno relajante con grandes espacios verdes, áreas de juegos y senderos para caminar. Este parque es un lugar perfecto para que las familias y los turistas disfruten del aire libre en el corazón de la ciudad.