Algemesí posee un paisaje arquitectónico diverso que refleja su larga y variada historia. Las calles de la ciudad están llenas de edificios históricos, muchos de los cuales datan de la época medieval. La Basílica de San Jaime Apóstol es uno de los edificios religiosos más importantes de la ciudad, ofreciendo un impresionante ejemplo de arquitectura barroca. En su interior, los visitantes pueden admirar un altar intrincado y magníficas obras de arte.
La ciudad también alberga otras hermosas iglesias y capillas, como la Iglesia de Santa María y la Capilla de la Virgen de la Salud, que merecen una visita. Además, el ayuntamiento y las plazas circundantes reflejan la grandeza de la arquitectura cívica histórica.
Para los amantes de la naturaleza, la región de la Ribera Alta cercana ofrece tranquilidad, con vastos campos de naranjos y arrozales que dominan el paisaje. La ciudad no está lejos del Parque Natural de la Albufera, un paraíso para los observadores de aves y quienes deseen experimentar los diversos ecosistemas de los humedales valencianos.