El paisaje arquitectónico de Paterna es una mezcla de influencias históricas y modernas. Uno de los edificios más emblemáticos es la Torre de Paterna, una torre del siglo XIV que sirvió como torre de vigilancia y defensa durante el periodo medieval. Su impresionante diseño y su buen estado de conservación la convierten en una visita obligada para los amantes de la historia y la arquitectura.
Las Cuevas de Paterna, una serie de antiguas viviendas excavadas en las colinas, ofrecen otra fascinante visión del pasado de la ciudad. Estas viviendas-cueva, utilizadas por los antiguos residentes, se han conservado como parte del patrimonio histórico de Paterna, proporcionando una experiencia única para los visitantes interesados en la arqueología y la historia.
Para los amantes de la naturaleza, el Parque Natural de La Vallesa es un destino popular que ofrece una escapada tranquila. Este gran parque natural es perfecto para hacer senderismo, picnics o simplemente disfrutar del hermoso paisaje mediterráneo. La ciudad también cuenta con varios museos y centros culturales, como el Museo de la Cerámica, que celebra la rica tradición alfarera de Paterna.