Tabernes de Valldigna cuenta con una rica historia que se remonta a la época romana, cuando fue fundada como una pequeña villa. Más tarde, bajo el dominio musulmán, la ciudad floreció, lo que dejó una marca duradera en su arquitectura y cultura. Tras la reconquista cristiana en el siglo XIII, la ciudad experimentó un renacimiento, impulsado por la construcción del Monasterio de Santa María de Valldigna, uno de sus monumentos más emblemáticos, fundado en 1298 por el rey Jaime II de Aragón.
La cultura de la ciudad está profundamente influenciada por sus tradiciones valencianas y festivales. Entre los eventos más destacados se encuentran las Fallas, una festividad en la que se queman monumentos artísticos en grandes hogueras, y otras celebraciones relacionadas con la cosecha que reflejan el vínculo de la comunidad con la tierra. Los habitantes de Tabernes de Valldigna mantienen con orgullo sus costumbres, lo que da a la ciudad un aire acogedor y auténtico.
El Monasterio de Santa María de Valldigna es un símbolo del pasado medieval de la ciudad y un punto clave para quienes buscan explorar su historia. Los visitantes también pueden sumergirse en la cultura local asistiendo a sus numerosas festividades y eventos, que capturan el espíritu alegre y la tradición de esta encantadora ciudad.